Tenemos un Anónimo que comentó en la entrada «La Adolescencia de los Gays» y que habla de cómo la sociedad pueriliza a los homosexuales, dándoles las prohibiciones que se le dan a los adolescentes, es decir: no te cases, no puedes tener hijos, disfruta la vida, estás joven, etc.  También comentaba sobre cómo los homosexuales elegían un objeto sexual (así se dice parejas sexuales en psicología) de forma narcisista y espera «encontrarse a sí mismo una y otra vez».  He decidido colocar mi respuesta a ese comentario como una entrada más, porque considero que es muy importante tratar estos temas.  Ahí va:

Anónimo, excelente aporte. Las palabras que usas y el manejo que haces de ellas me hacen pensar que tienes alguna relación con mi profesión, por cierto, bienvenido(a) al blog.

Tu punto es interesante, yo pienso que es algo de doble vía; por un lado, el sistema sí pueriliza la vida de muchos sujetos homosexuales y tal vez relacionado a esto muchos se convierten en hombres y mujeres de alto rendimiento en el terreno profesional o en áreas que no tengan que ver con la reproducción y la vida de pareja. Ahora bien, al mismo tiempo, esta forma de compensar habla de cómo la comunidad homosexual también considera valioso el estilo de vida heterosexual, con hijos, una casa con cerca blanca y un perro. Me parece que este estilo de vida tradicional no es necesariamente un estilo de vida sano, al menos no en todos los casos.

Por otro lado, la dificultad para encajar en el patrón de vida y relaciones heterosexuales también es una oportunidad de encontrar formas nuevas y más sanas de funcionar. Esta es una prerrogativa, no sólo de la comunidad homosexual, sino de todo aquel que no encaje con el patrón establecido. Encontrar formas nuevas de funcionamiento que sean adaptativas y saludables es algo que la humanidad necesita desesperadamente.

Por otra parte, nunca he estado muy de acuerdo con que la elección de objeto sexual (pareja) del homosexual sea necesariamente narcisista solo porque ambos sujetos tienen el mismo tipo de genitales. Creo que puede haber un gran monto de narcisismo en sujetos homosexuales debido a las faltas de validación que se reciben del medio, a la dificultad para encontrar modelos a quienes idealizar en ese medio y a la dificultad para «sentirse normal» en la comunidad más amplia. Estas faltas producen reacciones, síntomas, rasgos y, en casos extremos, trastornos narcisistas. Pero no veo como narcisista la elección de objeto homosexual, eso nos haría pensar que todos lo homosexuales poseen rasgos narcisistas demasiado importantes como para no ser atendidos. Nos haría patologizar a la gente gay y esperar que «se cure de su narcisismo», el cual, manifestado por la elección de objeto, sería como esperar que «se cure de su homosexualidad». Tendríamos un problema de concepto y estaríamos olvidando que la gente se une en pareja no solo por su tipo de genitales, sino por un cúmulo de características psicológicas que son invisibles a los ojos y que muy bien pueden ser, no solo correspondientes, sino complementarias a las propias.

Además, hay cientos de miles de narcisistas caminando por las calles quienes, además, son heterosexuales. Así que aunque muchos homosexuales poseen rasgos narcisistas importantes, muchos otros no los tienen y, la gran mayoría de narcisistas no son siquiera homosexuales.