Uno de mis primos y yo fuimos a ver BENT en la noche del estreno. La obra está más que recomendada.
Mis actuaciones favoritas: Joshua Manopla C. (Rudy) y Carlos Caballero (Greta, Horst). Por su parte, Rogelio Bustamante (Max) y José Carranza (Tío Freddie) también hacen una presentación excelente.
El público en la sala se comportó muy bien, a la altura de la ocasión y, al final, los aplausos iban a tirar abajo el teatro. La verdad es que lo merecen.
Los actores se desempeñan de manera tal que logran traerte a la realidad de los prisioneros en los campos de concentración nazi y cómo eran clasificados. A ratos tienes uno que otro flash, mientras ves la obra, de las clasificaciones que usamos hoy día y la forma en que la gente se segrega entre sí. Es «comida para el pensamiento», como dirían los gringos.
Como les escribía al grupo de la obra en Facebook: «Creo que es, además, una temática universal si pensamos que la vida cobra sentido en relación con los demás y que, más allá de la clasificación que hacían los Nazi, todavía los seres humanos nos clasificamos unos a otros y podemos devaluar a otros o a nosotros mismos basados en las diferencias que nos hacen únicos. El personaje de Max lo hace a uno pensar, además, hasta qué grado llegaría uno para sobrevivir y para proteger a otro y a nosotros mismos ¿Negar la propia naturaleza, destruir a quien se ama o eventualmente admitirse y darse cuenta que realmente no se existe sin los demás?»
Bueno, no quiero hacer demasiados comentarios, solo volver a recomendar la obra y asegurarles que la producción es excelente y, si te lo permites, te conecta con muchos aspectos de la realidad humana lo cual es, al fin y al cabo, el trabajo del teatro.
Desde este rincón del universo virtual, un saludo a todos los involucrados en la obra y la seguridad de que conseguiré un sombrero solo para quitármelo ante ustedes. ¡MUY BUEN TRABAJO GENTE!
A los demás lectores, vayan a verla, es una buena forma de pasarla bien, reflexionar y evitar los pianos (los lectores frecuentes saben a qué me refiero).
Saludos,
Hola a todos, ayer fui a ver la obra «BENT», es una excelente obra, la verdad no dejen de ir al teatro porque sino es una pena que pierdan esta oportunidad, buenos actores, y sí logran transportarte al contexto en que se desarrolla la misma, el tema de la clasificación que análogamente podemos compararla a la que hace nuestra socieadad con diferentes grupos, es un buen punto tocado acá, y si lo ves estrictamente con el tema de diversidad sexual aún más, uno de los personajes que más me gustó fue el Horst y Max, sobretodo al final, y el cierre de la obra waoo muy bueno, ya no digo más, para que vayan, voy a conseguir la película, a ver que tal.>>Saludos…
Traer a nuestra actualidad una historia de la vida real es algo sumamente valioso e importante. Interpretar lo que una vez sucedió en un momento crítico en la historia de la humanidad toma un giro que debe llegar a lo más profundo de nuestras vidas, ya que existen pasajes que han quedado en el oscurantismo, en el misterio, muchos de ellos no se han revelado y otros más han salido a la luz pública como producto de la evolución de una sociedad que tiene el derecho íntegro de conocer los verdaderos los capítulos de la vida de este mundo. >>Desde mi punto de vista “Bent” se ha convertido en una de las herramientas para dar a conocer uno de esos capítulos, que sé que muchos no lo sabían. El etiquetaje o clasificación durante el período del “Führer” y la Alemania Nazi se convirtió en lo que determinaría quitarle la vida o no a una persona. Quitarles sus derechos, prohibirles expresarse, hasta eliminarles sus sentimientos y pensamientos fue un intento infructuoso, tal y como se muestra en esta magnífica obra de teatro. Lo que sucedió en ese entonces es una lección no solo para nosotros, sino para el mundo entero. Permitir que nos cosan una insignia en nuestras ropas lo único que produce es la destrucción de de nuestros derechos y libertades, es auto-denigrarnos. No permitamos que sucedan estas cosas.>>El personaje de Max nos enseña que la naturaleza de nuestro existir es lo que le da sentido a nuestras vidas, es algo que no podemos negar y que no nos pueden coartar. Su convivencia con Horst en el campo de concentración le demostró, un poco tarde, la necesidad de co-existencia que había nacido entre los dos; creo que esto fue lo que los ayudó a mantenerse vivos hasta el último momento. Es de mi opinión, que lo que nos demuestra esta obra es que nada ganamos con segregarnos unos con otros, olvidarnos de la existencia de los demás trae como consecuencia hacernos los ciegos y convertirnos en egoístas y meros espectadores de los que sucede a nuestro alrededor.>>“Sin palabras” fue mi comentario una vez terminó la obra, luego de haber presenciado tan excelente trabajo en escena. Me pongo de pie para seguir aplaudiendo a todos los actores, al equipo de producción y directores. A los que no han ido a verla, se la recomiendo. Por mi parte, creo que iré a verla otra vez…>>Saludos,>>Sr. Kd>>Pd. También espero que muchos pianos dejen de caer…
Olvidé comentar que el público el día viernes que asistí a la obra «Bent» no se comportó muy bien, en varias ocasiones escuché risas nerviosas de parte de chicas que fueron a ver la obra, a mi parecer Str8, porque cada vez que usaban un lenguaje algo fuerte en ésta,les daba por reirse, en escenas que a mi parecer eran bien serias. Al final las personas se pusieron de pie a aplaudir a los actores cuando termina la obra porque se lo merecían.>>Saludos,
Simplemente ir a ver esta obra es una manera de activismo positivo.>Y, por si las moscas, es bueno tener el piano a mano…>A.d.o.