En las clases sobre Psicopatología (enfermedades mentales) que dicto en la Universidad, siempre existen problemas con el tema de la adicción sexual, porque no está clasificada en los manuales diagnósticos, sin embargo la vemos llegar cada vez más frecuentemente a las clínicas.

Pareciera que nuestra cultura NO ayuda en la prevención del desarrollo de esta adicción, al igual que NO apoya en prevenir el acoholismo u otras formas de dependencia. Los hombres gay no son una excepción y por eso traigo el tema al blog. En hombres gay estamos presentando una incidencia importante de adicción sexual, aunque solo puedo comentarlo desde mi silla en el consultorio porque, como siempre, las investigaciones en nuestro país son limitadas.

Ahora bien, como todas las adicciones, la adicción al sexo es una forma desadaptativa de lidiar con afectos internos. Esta forma desadaptada se desarrolla debido a una combinación de factores que no posee todo el mundo, por eso no todos los que tienen sexo son adictos a él, aunque tengan sexo con extraños, prácticas sexuales inusuales o encuentros sexuales casuales de una noche. La adicción sexual implica características más allá de eso, veamos algunas sacadas directamente del libro de Robert Weiss MSW, CAS «Cruise Control: Understanding sex addiction in gay men» (una traducción aproximada sería «Piloto Automático: Entendiendo la adicción sexual en hombres gay»).

Identificando la adicción sexual:

  1. Un patrón de comportamiento sexual fuera de control.
  2. Consecuencias severas debido al comportamiento sexual.
  3. Incapacidad para detener el comportamiento sexual a pesar de las consecuencias negativas.
  4. Búsqueda continua de comportamiento sexual autodestructivo o de alto riesgo.
  5. Actividades importantes de tipo social, recreativo o laboral son sacrificadas o reducidas debido al comportamiento sexual adictivo.
  6. Deseo persistente o intentos de limitar el comportamiento sexual.
  7. La Obsesión Sexual y la Fantasía se convierten en las estrategias principales para lidiar con las emociones.
  8. Se busca incrementar la cantidad de actividad sexual o la intensidad de la misma debido a que el nivel actual es insuficiente.
  9. Cambios de humor severos alrededor de la actividad sexual.
  10. Cantidad de tiempo inapropiada (excesiva) dedicada a obtener sexo, a realizar actividad sexual o a recuperarse de experiencias sexuales.

Este libro me ha gustado mucho por la forma práctica en que el autor cuenta las historias (con permiso, por supuesto) y brinda algunos señalamientos sobre qué es y qué NO es adicción sexual. Cabe destacar que la adicción sexual se da independientemente de la orientación sexual, así que cualquier persona puede desarrollarla siempre que posea la combinación adecuada de factores de riesgo.

Atentos a esto y a algunas entradas futuras sobre el mismo tema.

Saludos,