Existe un final paralelo al presentado en la última temporada de QaF en USA. Mientras Bryan, Michael, Ben y los demás bailan en un aparentemente reconstruido Babylon (el club gay al que asistimos durante toda la serie) un chico rubio con pinta de adolescente observa el bullicio y la multitud desde el otro lado de la calle, luego de dudar un momento, inicia su camino directo hacia la multitud.

Esta escena debió estar en el final oficial. No sé por qué la editaron pero deben haber tenido sus razones. Me cae muy bien que el chico rubio se vea muy joven y asustado ya que parece, como dijo alguien por ahí, un «nuevo Justin». Para los que no sepan, Justin es el chico más joven de los cinco personajes principales y es a quien seguimos desde el primer episodio de la serie mientras duda antes de entrar a Babylon. A lo largo de cinco años lo vemos crecer y convertirse en un joven adulto mientras mantiene una relación muy poco convencional con Bryan (el cazador promiscuo y megalómano, autosuficiente pero incapaz de un contacto realmente íntimo). Así que este «nuevo Justin» que se acerca a la discoteca es presentado de manera muy simbólica. Es otro más de los cientos que se atreven a entrar en la comunidad cada día. No sólo es curioso el hecho de detenerse en la farola y pisar el mismo charco que pisa Justin al principio (todo eso implica el reinicio de la historia en un nuevo personaje que encontrará su propio Bryan, su propio Michael, su propio Emmet, etc.) sino la forma en que está editada la escena: el chico camina y se detiene junto al farol, duda por un momento y luego baja de la acera para dirigirse a Babylon. En el mismo instante en que pisa el charco, la cantante de la canción de fondo dice «I step out of the ordinary…» (doy un paso fuera de lo ordinario) y a medida que el chico camina hacia Babylon se ve cómo su confianza va creciendo, al igual que su decisión, el chico es un buen actor por lo visto y justo en ese momento la cantante dice «I can feel my soul ascending, I’m on my way, you can’t stop me now…» (puedo sentir mi alma elevándose, voy en camino, ya no puedes detenerme).

Definitivamente es una belleza, es el símbolo de toda la comunidad y las legiones de gente gay o simplemente «diferente» que se atreve a vivirse su diferencia y a estar orgulloso de quienes son. Eso es motivo de celebración. Aunque aquí está simbolizado por la discoteca y la multitud, pienso que es importante ver más allá de la forma y captar un nivel más profundo de la intención detrás de la música y la multitud.

El final oficial, el que salió en la serie, también tiene otro cierre que complementa al del chico rubio. Michael le dice a Bryan (quien se hallaba cabizbajo por la partida de Justin a Nueva York): «you will always be young, you will always be beautiful… you’re Bryan Kinney for god’s sake!» (Por siempre serás joven, serás hermoso eternamente… tú eres Bryan Kinney, por amor a dios!) y, en el fondo, es lo que en última instancia trae a Bryan a la realidad de que dentro de su grupo siempre será él quien juegue ese papel, aunque haya otros grupos que vengan después o que funcionen paralelamente (como el futuro grupo que el chico rubio encontrará esa noche) donde otros Bryans puedan existir.

Creo que Bryan termina solo porque es parte de su personaje, no tenía sentido que terminara con nadie. El está enamorado de Justin y acabar con otra persona en una relación de largo plazo simplemente sacaría al personaje de su naturaleza. Solo si regresa Justin o si otra vez se enamora de alguien, Bryan podría establecerse. Recordemos, sin embargo, que las «reglas» de la relación entre Justin y Bryan siempre fueron poco convencionales; una relación abierta en la que se intercambiaban parejas y se permitía contacto con extraños, por lo tanto la promiscuidad es inherente a ese personaje. Por eso siempre será joven y hermoso, porque vive en una burbuja sostenida por su poder económico y su resistencia a crecer según los estándares de la sociedad. Ese personaje no es necesariamente un buen ejemplo, debe ser, como todos los demás elementos de la serie, visto solo por gente con criterio formado, no es alguien para imitar solo porque sí. Puede uno aprender de este personaje, pero debe uno también analizarlo muy bien.

El monólogo final es dado por la voz de Michael, quien resume un hecho importante de la vida de la comunidad homosexual a lo largo de la historia y es bastante esperanzador:

«And so the thumpa-thumpa* continues, it always will. No matter what happens, no matter who’s president. As our lady of disco, the devine Miss Gloria Gaynor has always sung to us: we will survive. «

(Y así el thumpa-thumpa* continúa. Siempre seguirá, no importa lo que pase, no importa quién sea presidente. Como nuestra señora del disco, la divina Miss Gloria Gaynor, siempre nos cantó: ‘sobreviviremos’)

Vaya, parece que sí acabé escribiendo algo sobre la forma en que se presentan personajes homosexuales en los medios. Con el tiempo, ojalá la comunidad también tenga ejemplos de otro tipo de personajes, los que también existen en la vida real.

Saludos,

*Thumpa-Thumpa: «the gay pulse that never stops«