Anoche pasé por casa de un amigo de infancia quien me trajo algunos encargos de su más reciente viaje, y sucedió que acabamos en casa de otro amigo de infancia pasando el rato y, como decimos en Panamá, «echando cuentos».  Al final éramos 5 amigos de colegio poniéndose al día con las vidas de cada cual, dos Médicos, dos Ingenieros y un Psicólogo Clínico (ya ven que siempre me tocó ser distinto), pero el asunto más importante es que comprobé una sospecha que tenía hace días en mi mente: he pasado mucho tiempo en el submundo.  Paso a explicar.

Sucede que la vida de la comunidad homosexual, bisexual, lésbica y demás, es considerablemente distinta a la de las personas heterosexuales.  A punta de involucrarme cada vez más en la comunidad homosexual he conocido a mucha gente que tiene que ver con este tema, de no conocer a nadie hace seis o siete años atrás, ahora tengo muchos amigos gays, uno que otro colega diverso y me he empapado bastante de la subcultura homosexual.

Así que anoche hablaba con estos cuatro amigos heterosexuales y noté algunas diferencias interesantes.  Si empezamos de afuera hacia adentro, noté que ninguno de mis amigos gays tiene barriga, varios van al gimnasio o se cuidan de alguna forma.  Si profundizamos un poco más, noté que mis amigos homosexuales o bisexuales suelen «echar cuentos» igual que los heterosexuales, pero parecen conectarse más con contenidos afectivos e intencionalmente sentarse a escuchar.  Claro que uno selecciona a sus amigos por características comunes y por características complementarias así que puede que yo haya elegido, de entre la gente gay que conozco, a mis amigos debido a sus capacidades de escucha o introspección.  Hemos dicho desde siempre que la gente homosexual es tan distinta entre sí como la heterosexual así que también hay, caminando por la calle, varios gays con barriga e incapaces de sentarse a escuchar a otro.

Otra diferencia interesante es que mis amigos heterosexuales están casi todos casados y, el que no, ya va en camino.  Hablan de problemas de pareja muy específicos y realizan una especie de liga masculina a través de conversar sobre tecnología, modelos de carros, el trabajo, la diferencia entre ellos y las mujeres o hasta juegos de PSP.  Por otro lado, mis amigos homosexuales parecen estar enfocados en intereses similares pero vistos con un lente distinto.  Aunque es difícil de explicar, se nota que el mundo se ve diferente desde cada grupo.  Por ejemplo: no sucede tan seguido la retórica sobre la diferencia entre hombres y mujeres, a ratos el mundo parece estar poblado solo por varones y no es tan importante qué carro manejas pero sí cómo es tu apariencia física.

Más que decir si las personas gays o heterosexuales son de una forma o de otra, quería compartir algo de mi sensación frente a la diferencia que estoy percibiendo entre MIS amigos heterosexuales y MIS amigos no-heterosexuales.  Estoy haciendo un ejercicio en estos días en que trato de observar algunas cosas en mis relaciones sociales sin utilizar lo que sé teóricamente, estoy tratando de concentrarme más bien en lo que puedo observar evitando filtrarlo a través de la teoría.  Por eso este post es algo menos «científico» que otros, lo que he escrito hoy puede no ser comprobable.

Saludos,