En pocos minutos terminaremos el 2009 en este hemisferio. No podía cerrar el año sin pasar por aquí y desearles a todos los lectores un 2010 en el que todos tengamos un espacio para ser más auténticos.

Espero que, en la década que inica, aquellos que viven como ciudadanos de segunda clase puedan dejar de serlo. Deseo que quienes viven en silencio y con temor, sintiendo que su diferencia podría poner en riesgo los vínculos con sus seres queridos, puedan encontrar formas de expresarse sin ser rechazados. Ansío que cada vez sean más a quienes se les reconocen sus derechos humanos y civiles y que, como comunidad, podamos ser más reflexivos y abstractos para, además de crear nuestra propia cultura como lo hemos ido haciendo a través de estos años, también evitemos segregarnos.

Recuerdo a los que ya no están con nosotros porque se han ido de diferentes formas, a quienes han muerto por el VIH-SIDA, a quienes han perdido la vida por accidentes o han cometido suicidio. Ojalá estuviesen con nosotros y no hubiesen sido víctimas de semejantes desgracias.

Pienso también en las generaciones nuevas, presionadas por los medios a comportarse de alguna forma predeterminada en una desesperada búsqueda por identidad. Aunque sé que es poco probable que suceda, deseo que esa búsqueda humana universal, esa carrera constante por encontrar quiénes somos en realidad, se vea menos interrumpida para todos.

Decidir ser uno mismo no es algo sencillo de lograr e incluso si se logra es una vida difícil, pero más sana. Ojalá todos podamos avanzar un poco más en esa dirección.

Un abrazo y felicidades en el nuevo año, que los cambios que vengan sean para mejor.

Alvaro

P.D: I do believe I have been changed for the better.